La evolución del transporte de mercancías

El e-commerce ha impactado directamente en la industria del transporte como un esquema de compras que ha llegado para quedarse.

Tan sólo el año pasado, la tasa de crecimiento del comercio electrónico en nuestro país rondó el 30%, no obstante, con el avance de la contingencia sanitaria, las proyecciones para el 2020 se han disparado hasta el 60%, según lo indica la consultora IDC.

Este crecimiento ha impactado directamente en los servicios de última milla del transporte de carga, mismos que han tenido un importante crecimiento con la entrega de paquetes hasta la puerta de los hogares.

Una estrategia digital

Como nunca antes, la transformación digital se ha consolidado como parte de la estrategia de continuidad de operaciones de las empresas, tanto de las que dispusieron del home office como modalidad operativa, como de las que aprovecharon esta oportunidad para aumentar su presencia en plataformas digitales y migrar su oferta al alcance de los consumidores.

Es en este sentido, el transporte de carga y los servicios dedicados a la distribución de productos, necesitan estar preparados para asegurar su respuesta en el servicio, con una asistencia ágil y personalizada a sus clientes directos e indirectos, conociendo sus inquietudes y apresurando los tiempos de respuesta.

Esta es una evolución que se ha dado en todas las industrias a nivel mundial. En el caso de nuestro país, la adopción de estos esquemas ha sido acelerada debido al confinamiento, por ende, las empresas no pueden quedarse rezagadas, puesto que afectará aún más su solvencia y competitividad.

Para los negocios, ha llegado el momento de adaptarse, de estar presentes en plataformas digitales y aprovechar la alta demanda que se ha ido generando en diversas industrias, echando mano de equipos de transporte de reparto, como los de última milla, para hacer llegar sus productos eficientemente a sus consumidores. Hoy en día la experiencia del cliente se ha colocado como un diferenciador para repetir la compra.

Las oportunidades

La adopción de nuevos esquemas de negocio en pro de la digitalización y la optimización de costos, en medio de una crisis profunda de flujo de efectivo, tendrá su boom en las herramientas financieras que abren el acceso a un amplio catálogo de beneficios fiscales, con modelos de arrendamiento hechos a la medida de las necesidades del mercado.

El arrendamiento de vehículos de transporte democratizará el acceso de las empresas hacia las oportunidades de negocio, evitando su descapitalización, a la par que permite su especialización hacia crecientes nichos de mercado. Además, el uso de la tecnología, como la telemetría o la aerodinámica, impulsará la eficiencia en sus operaciones.

Asimismo, el apoyo en los servicios de valor agregado que otorga esta herramienta, concentrará la atención de las empresas en su core business, atendiendo de mejor manera las crecientes necesidades en el mercado.

El mayor aprendizaje que nos deja la actual crisis económica es la innovación. Esta coyuntura significa el desapego de las formas tradicionales y la reafirmación de la continua evolución.